Cada día de vida de los cachorros, lo consideramos una página en blanco para rellenarla de experiencias nuevas y positivas para los retoños.
Nuestros perros son estimulados desde pronta edad con el objetivo de garantizar una optimo desarrollo físico y cognitivo. Enriquecemos su entorno con arena, gravilla, cemento, césped, hojas secas, maderas, piedras, barro, cuerdas, juguetes, agua, distintos estímulos auditivos, corren por praderas libres y por bosques de encinas.
Horas y horas de juegos y exploración es lo que necesita un cachorro en sus primeros meses de vida. Somos reacios a la cría en cajas de madera y jaulas durante interminables horas, ya que es uno de los factores principales para el desarrollo de estereotipias y trastornos obsesivos del comportamiento a pronta edad.